lunes, 23 de febrero de 2015

Coves dels Hams

En estas fiestas de Navidad conseguimos unas invitaciones para visitar estar preciosas cuevas y el pasado día de San Valentín aprovechamos para hacer esta romántica visita.


Estas cuevas están situadas en la entrada de Porto Cristo, y pertenecen al municipio de Manacor. Los inmensos carteles que se pueden ver desde la carretera te guiarán hasta su entrada.

Fueron descubiertas por el espeólogo Pedro Caldentey el 2 de marzo de 1905Parece ser que fueron las primeras cuevas que se abrieron al público allá por el año 1910.

El día que nosotros fuimos tuvimos la gran suerte que cuando entramos no había nadie más, así que disfrutamos de una visita completamente personal y privada. ¡Una guía para nosotros solos!



Primero visitamos una de las cuevas en donde se expone un pequeño vídeo sobre Julio Verne, para después acceder a otra sala mucho más grande. En esta última sala se proyecta un cortometraje de las grandes aventuras de Julio Verne, sobre una de las paredes de la cueva, como si de una sala de cine se tratara. La verdad es que las imágenes están muy bien escogidas y como la pared no es plana, parece una animación en tres dimensiones.

Salimos de esta cueva para adentrarnos en la cueva principal que fue la que se descubrió primero. Si sufrís de claustrofobia no os recomiendo la visita, porque se adentra unos 30 metros en la tierra, y si lo piensas, puede resultar un poco agobiante.


Coves dels Hams


En esta cueva se pueden ver diferentes salas, grandes y pequeñas, en las que la belleza del lugar te embriaga por completo. He de decir, que la iluminación ayuda mucho a crear este ambiente tan místico, aunque cuesta reflejarlo en las fotos. Está terminantemente prohibido el uso de flash para no dañar las rocas. De hecho, pudimos ver como algunas formaciones presentaban una humedad debido a las luces de los flashes.

¿Estalactitas o estalagmitas?

Esa es una pregunta que siempre nos hacemos. Pues bien, espero saber explicarlo correctamente. Las estalactitas crecen del techo hacia el suelo y como el agua pasa por su interior, son huecas. Las estalagmitas se forman desde el suelo hacia el techo por las gotas que van cayendo encima y estas son macizas. Por último, cuando las dos formaciones se juntan, se les llaman columnas. Para que os hagáis una idea de lo lento que es este proceso, tardan unos 30 años en crecer un solo centímetro. 

Durante todo el año, dentro de la cueva, se mantiene la misma temperatura, unos 20 grados y con una humedad del 80%. Por eso cuando entramos en invierno parece que hace calor y cuando lo hacemos en verano parece que está más fresquito.


Existen varios lagos dentro de esta cueva, pero el más grande, y posiblemente el más vistoso, se encuentra casi al final de nuestra visita. Lo llaman Mar de Venecia y sobre sus paredes se proyectan varias imágenes con música, al mismo tiempo que una pequeña barca se desliza por sus aguas.
¡Qué romántico!

Una última curiosidad que os puedo contar es que debido a los movimientos de la Tierra se pueden ver como algunas columnas están partidas por la mitad e incluso cabe entre ellas una mano. La naturaleza es increíble y caprichosa y nunca deja de sorprendernos.


Nos despedimos de vosotros desde estas hermosas cuevas que hemos tenido el placer de visitar después de tantos años. ¿Quién no ha ido alguna vez de pequeño con el colegio?


¡Hasta la próxima!